La galería Gertrude Glasshouse acogerá Permanent Marker, una exposición individual de Tara Denny que presenta un nuevo cuerpo de trabajo que interroga la relación entre la propiedad, la historia personal y la expresión artística. La muestra encuentra a la artista explorando temas de límites y comunicación a través de una serie de esculturas.
La práctica de Denny está profundamente marcada por su historia personal como superviviente de psicosis, una experiencia que le exigió reaprender el lenguaje y fomentó su dependencia de formas de comunicación no verbal. Su proceso de estudio se describe como una purga aislada e intensa de emociones cargadas, un método para redescubrir el control personal. Esta historia conforma la base física y conceptual de su obra. Las esculturas de la serie skyline son el producto de este diálogo intensamente privado, creadas a partir de una variedad de materiales encontrados y reutilizados que incluyen madera, plástico y fragmentos de una chaqueta de cuero, junto con sustancias maleables como la cera, que la artista estira y moldea a mano.
Los ensamblajes resultantes son ambiguos pero deliberados, y llevan las impresiones literales de la mano de la artista. Denny emplea lo que se describe como un «sistema obsesivamente codificado de gestos», que alude a una larga historia de mujeres artistas y poetas que han navegado las expectativas sociales a través de trayectorias idiosincrásicas y personales. Las obras se presentan como una reflexión sobre una cultura de la propiedad y el consumo, en contraste directo con la noción más compleja de la posesión de uno mismo.
Este uso de un lenguaje codificado y privado se manifiesta de forma más explícita en la adopción por parte de Denny de la taquigrafía. Influenciada por la poeta concreta local Thalia, la artista incorpora la arcana escritura en su trabajo. Para la pieza skyline_vip, una frase recordada de un grafiti en una sala psiquiátrica —»Podría estar en un yate comiendo pizza, pero en cambio estoy aquí»— se traduce a taquigrafía, incrustando un recuerdo profundamente personal en la escultura. Este acto encapsula la tensión central de la exposición: la traducción de una lucha interna y transformadora en una forma artística tangible, aunque todavía opaca.
Permanent Marker podrá visitarse en la Gertrude Glasshouse de Collingwood del 29 de agosto al 27 de septiembre de 2025. La inauguración está prevista para la tarde del jueves 28 de agosto.