En el verano de 2025, las puertas del Museo de Arte de Almaty se abrirán al público, marcando un hito en el panorama artístico de Asia Central. Este ambicioso proyecto no es solo el primer museo privado de arte moderno y contemporáneo de la región, sino también un testimonio del poder transformador del arte y la visión de un hombre.
Situado en la vibrante ciudad de Almaty, Kazajistán, este nuevo templo del arte se extiende sobre 9.400 m², un espacio diseñado para albergar más de 700 obras de arte moderno y contemporáneo kazajo y centroasiático. Pero la colección no se limita a la región; obras seminales de artistas internacionales como Fernand Léger, Richard Serra y Bill Viola encontrarán su hogar aquí, creando un diálogo fascinante entre lo local y lo global.
El fundador del museo, Nurlan Smagulov, un coleccionista, filántropo y empresario local, comparte su visión:
«El arte tiene el poder de transformar vidas, y una vez transformó la mía. Para mí, el Museo de Arte de Almaty no es solo un museo; sirve como un puente que conecta el arte vibrante y diverso de Asia Central con la escena cultural global.»
La arquitectura del museo, diseñada por la firma británica Chapman Taylor, es una obra de arte en sí misma. Dos estructuras en forma de ‘L’ se entrelazan, simbolizando la fusión armoniosa entre el paisaje natural de Almaty y su entorno urbano. Una, revestida de piedra caliza, representa las majestuosas montañas Tian Shan que abrazan la ciudad; la otra, cubierta de aluminio, evoca la modernidad de la metrópolis.
Almaty, conocida como el corazón cultural y económico de Kazajistán, es el escenario perfecto para este nuevo faro cultural. Con su rica historia como cruce de caminos de la antigua Ruta de la Seda, la ciudad fusiona tradición y modernidad, ofreciendo un telón de fondo único para esta aventura artística.
Bajo la dirección artística de Meruyert Kaliyeva y la curaduría principal de Inga Lāce, el museo se propone no solo exhibir arte, sino también nutrir el ecosistema artístico local. A través de exposiciones dinámicas, comisiones, publicaciones y programas educativos, el Museo de Arte de Almaty aspira a ser un catalizador para el diálogo cultural en la región y más allá.
El espacio interior del museo es tan impresionante como su exterior. Una sala de exposiciones temporales de 1.000 m² con techos de 12 metros de altura albergará exhibiciones especiales dos veces al año. La colección permanente se presentará en exposiciones temáticas rotativas, complementadas por salas dedicadas a artistas específicos y obras al aire libre encargadas especialmente para los jardines del museo.
Quizás lo más emocionante sea el «Art Street», un corredor espectacular iluminado naturalmente que conectará los espacios de exhibición con otras instalaciones, creando una experiencia inmersiva para los visitantes.
El Museo de Arte de Almaty no es solo un edificio o una colección; es una promesa de futuro. Al ser donado a la ciudad de Almaty, se convierte en un regalo para las generaciones venideras, un espacio donde el arte de Asia Central puede dialogar con el mundo, inspirar a nuevos creadores y transformar vidas, tal como una vez transformó la vida de su fundador.
Cuando el Museo de Arte de Almaty abra sus puertas en 2025, no solo inaugurará un nuevo espacio para el arte, sino que también escribirá un nuevo capítulo en la historia cultural de Asia Central. Será un faro de creatividad, un puente entre culturas y un testimonio del poder del arte para unir, inspirar y transformar.
El Programa
El Museo de Arte de Almaty abrirá sus puertas con dos exposiciones y un programa de arte escénico:
- Una muestra individual de la artista kazaja Almagul Menlibayeva titulada I Understand Everything, comisariada por la reputada comisaria tailandesa Gridthiya Gaweewong. La primera retrospectiva de la artista nacida en Almaty ofrece una muestra en profundidad de su obra desde los años ochenta hasta la actualidad, que abarca desde pinturas y obras sobre papel hasta cajas de luz y videoinstalaciones inmersivas. La obra de Menlibayeva ahonda en los relatos olvidados y las historias no contadas de Asia Central, abordando temas cruciales como el papel de la mujer, las políticas de identidad, la ecología y el neocolonialismo. Entrelaza estos temas con cosmologías y mitologías indígenas, presentando una exploración estratificada y matizada de la identidad en evolución de la región.
- Qonaqtar, una exposición colectiva comisariada por Inga Lāce que, a partir de la colección del museo, explora las conexiones y tensiones entre hospitalidad y migración, centrándose en Kazajstán, Asia Central y sus regiones vecinas.
- Anne Davidian comisariará el programa inaugural, que incluirá performances, películas, charlas y reuniones comunitarias. Está inspirado en el rico patrimonio musical de Asia Central y en la animada ubicación del museo, en el cruce de la avenida Al-Farabi, que debe su nombre a Abu Nasr Al-Farabi (nacido hacia 878), filósofo y autor de El gran libro de la música.
La colección
La colección del Museo de Arte de Almaty incluye obras de los artistas modernos kazajos Aisha Galimbayeva, Salikhitdin Aytbayev, Makum Kisamedinov y Shaimardan Sariyev. Se complementan con obras de artistas contemporáneos pioneros como Rustam Khalfin, Sergey Maslov, Yerbossyn Meldibekov, Saule Suleimenova y Said Atabekov. La creciente colección de arte contemporáneo de Asia Central incluye obras de artistas como Saodat Ismailova, de Uzbekistán, y Jazgul Madazimova, de Kirguistán. Los diálogos internacionales dentro de la colección son fomentados por artistas como Khadim Ali, Xu Zhen y Jadé Fadojutimi, entre otros.
Meruyert Kaliyeva, Directora Artística, comenta:
«Estamos aquí para celebrar las voces, visiones e historias de artistas de Kazajstán y otros países, proporcionando una vibrante plataforma para profundizar en el estudio y la apreciación del arte contemporáneo de la región. Pretendemos inspirar la curiosidad, el diálogo y una comprensión más profunda del patrimonio artístico y las expresiones contemporáneas que conforman y reflejan el paisaje cultural de Asia Central».