Jessabelle es una película dirigida por Kevin Greutert sobre un guion de Robert Ben Garant y est´ña protagonizada por Sarah Snook.
Pues dimos con esta película en Netflix como por casualidad y, como es costumbre, vamos a echarle un vistazo.
De obra maestra o algo que se le parezca, más bien nada de nada.
Argumento de Jessabelle
Una joven sufre un accidente en el que pierde a su hijo y a su novio y termina en silla de ruedas. No contento el destino con las desgracias, pierde también a su padre y, vaya por Dios, es también objeto de apariciones y de un oscuro pasado.
Si las hay que, lo que es con suerte, no nacen.
La Película. Crítica
Me resultó divertida por lo descuidada que está: tiene fallos de continuidad, los sustos están bien y es totalmente predecible por su falta de originalidad. A veces se nos parece un telefilme con un guion facilón (más truculento, eso sí), pero de una factura más bien torpe y un guion que consiste en varias escenas de sustos, un final que todos esperan y, el resto, a rellenar.
Y el relleno que lleva no sabe bien, más bien es pegajoso y torpe.
Terminé de verla (a veces las dejo, lo voy a confesar ya) porque me hizo gracia la acumulación de (lo vamos a decir) despropósitos en todos los sentidos. No es que tenga un a mala producción, es que parece como que, sin cortarse un pelo, el equipo fuese allí a cobrar y listo, que hay cosas mejores que hacer en esta vida que otra película de terror insulsa y nada original.
Nos sigue sorprendiendo como, con el casi siempre titánico esfuerzo que cuesta hacer una película, Hollywood nos muestre que, una vez más, se pueden hacer como churros cuando la industria funciona y los circuitos van como la seda. De otra manera, esto no hubiese visto jamás la luz.
Los diálogos rezuman… ironía (aunque creo que no lo pretendían).
Nuestra Opinión
Le vamos a dar cuatro estrellitas porque de fotografía no está mal, el sonido salva la peli (un poco) y los sustos (sin ser nada originales) están bien montados: el espectro tiene una dentadura perfecta, un poco manchada pero perfecta, eso sí.
¡Pues cuatro estrellas por esos dientes!