Una decoración acogedora, dulce y a la vez innovadora es posible gracias a los diseños de los nórdicos y las combinaciones de colores que presentan
El estilo nórdico es uno de los favoritos de los amantes de la decoración y el diseño. Y no es para menos: versátil, funcional, práctico, acogedor, luminoso… El look nórdico lo tiene todo.
Una tendencia tan versátil que admite una gran variedad de combinaciones. Entre ellas, el look romántico. Dos estilos que se entienden muy bien y que queremos presentarte en este artículo: el nórdico más romántico en dulces tonos pastel.
Iconos del look nórdico y romántico, juntos pero no revueltos
Si algo caracteriza al estilo nórdico es la simplicidad de sus formas y la luminosidad de sus colores neutros. Su mobiliario se diferencia de otros estilos por la funcionalidad de sus diseños, sencillos y prácticos, a la parque elegantes y profundamente innovadores.
Y es que algunos de los muebles de estilo escandinavo han marcado un antes y un después en el mundo de la decoración. Véase por ejemplo el caso de las mesas auxiliares redondas, de patas livianas y madera noble, o la popular silla Eames.
Estos diseños son fácilmente reconocibles por sus líneas rectas que imprimen cierta sobriedad al conjunto. Tal vez por eso, las piezas de estilo clásico y romántico encajan muy bien en estos escenarios, ya que contribuyen a dulcificar los ambientes.
¿Y qué iconos del romántico clásico encajarían bien en los fríos y minimalistas interiores nórdicos? Por ejemplo, una suntuosa lámpara chandelier, una silla medallón, una butaca con tapizado capitoné, un espejo barroco con marco dorado, un candelabro de plata o incluso un mueble con sinuosas curvas de corte afrancesado.
La clave para integrar estas piezas en los ambientes nórdicos es con ayuda del color. Como el blanco es la tonalidad predominante en los interiores escandinavos, un mueble clásico en este color no desentonará en el ambiente. Por el contrario, otra posibilidad es destacar las piezas románticas para romper con esa frialdad que transmite la decoración nórdica: por ejemplo, recurriendo a un espejo dorado.
Delicados tonos pastel
Otro detalle importante que ayudará a dulcificar los fríos interiores nórdicos es el color. En este sentido, los delicados tonos pastel son los grandes protagonistas de la decoración romántica. Una propuesta cromática que encaja a la perfección con el look escandinavo, ya que suaviza estos ambientes.
En la decoración nórdica predominan el blanco y los tonos neutros, como el gris. Colores que transmiten luminosidad y relax, pero también sensación de frialdad. Por ello, los tonos pastel hacen que los interiores resulten mucho más acogedores y cálidos. Existen una gran variedad de tonos pastel: rosa empolvado, azul cielo, verde menta…
Regalar flores
Otra tendencia que también está presente en la decoración nórdica es la naturaleza. Desde estampados botánicos hasta materiales naturales. El look romántico también tiene mucho que decir sobre esta tendencia y lo hace a través de los arreglos florales. Suntuosos jarrones de estilo clásico y repletos de flores naturales ponen el broche final a los interiores nórdicos.
Suntuosas cortinas y alfombras clásicas
Y, por supuesto, tampoco hay que perder de vista a los textiles que contribuyen a sumar calidez y confort a la decoración. Como se trata de vestir los interiores con cierto romanticismo, en Decorablog te recomendamos las cortinas suntuosas y de tejidos gruesos como el terciopelo que aporten cierto dramatismo a la decoración. También se pueden añadir detalles decorativos que pongan el broche final, como por ejemplo, un alzapaño.
Y para el suelo, nada mejor que una alfombra de lana y de estilo clásico, con prints geométricos. Lo ideal es que los colores de este accesorio guarden relación con el resto de la decoración. Así unificamos todo el conjunto.
El contenido de este comunicado fue publicado en la web de Decorablog