Desde 1966, Inglaterra no ganaba un trofeo internacional, cuando venciese a Alemania en la Final de la Copa del Mundo de Fútbol. Aquel domingo 11 de julio, Inglaterra vivía un suceso histórico para los aficionados ingleses.
Las entradas se vendían por miles de libras en internet y los aficionados sólo tenían un pensamiento: no podían perderse el partido. Los aficionados se amontonaban por miles ante el estadio de Wembley, la catedral del fútbol inglés. Con o sin entrada, miles de aficionados se congregaban… con una gran, grandísima concentración de alcohol en sangre.
¿Saben lo que eso significa? Sí, todo se fue de madre.
Un documental que va más allá del fútbol
Si no sois aficionados, probablemente no lo entenderéis, y es que el fútbol es casi una religión para los aficionados, que viven a través de los resultados y a través de la emoción que transmiten los jugadores desde el campo. Pero, como bien sabrán, toda la fiesta previa tiende a írsele de las manos a los aficionados antes de los partidos.
Como en otros muchos deportes.
“La final: Caos en Wembley” no es la historia de aquel partido que enfrentó a Inglaterra contra Italia, es la historia de los altercados que tuvieron lugar antes y después del partido y que ahora Netflix nos desvela.
“La final: Caos en Wembley” es un documental que narra el partido desde el punto de vista del aficionado y de los encargados de la seguridad. Más que una narración del partido, es una crónica sobre lo sucedido en las inmediaciones del estadio y qué pasa allí, cómo se siguen comportando los aficionados y lo peligroso que puede resultar un encuentro de esta envergadura.
En el documental tenemos a aficionados de los dos países, rivales históricos, pero también muchas entrevistas con los encargados de la seguridad del estadio y cómo intentaron controlar a unos aficionados que rozaban la violencia.
Muchos de los aficionados se presentaron sin entrada, tratando de forzar su entrada al estadio. Era de esperar y todo estaba preparado.
El documental también incluye lo ocurrido en el partido, la narración del encuentro, lo que todos conocemos, lo que pasará a la Historia del Fútbol. Poco que añadir a este respecto, porque los protagonistas del documental, más que los jugadores, son los aficionados.
No es la primera vez que sucede algo terrible en un estadio de fútbol
Con este partido se tomaron las medidas, y es que la tragedia de 1985 le vino a muchos a la cabeza. También enfrentaba a un equipo italiano, la Juventus de Turín, contra otro inglés, el Liverpool. Como sabrán, fue uno de los desastres que cambiaron el fútbol: murieron varios aficionados y, desde entonces, se multiplicaron las medidas de seguridad en los estadios de fútbol.
Nuestra opinión
Un documental entretenido que, sin embargo, no desvela nada nuevo si eres aficionado al fútbol y lo llevas siguiendo desde hace años: sí, es peligroso acudir a un encuentro de esta envergadura y en los estadios la gente insulta, maldice y suelta toda su rabia.
Un documental que, sin llamar la atención demasiado, promete más de lo que da en realidad y nos deja un poco con el sabor a una crónica insípida de un partido monumental y nos cuenta lo que ya sabemos y esperamos.