Snack Shack es una película escrita y dirigida por Adam Rehmeier y protagonizada por Conor Sherry y Gabriel LaBelle.
Como si de un deja vu se tratara, “Snack Shack” nos devuelve una vez más a la adolescencia y sus paisajes más comunes como empezar a hacerse mayor, la amistad, el despertar del amor y del dinero.
Una película que tiene la gracia de devolvernos a los años 90 con mucho estilo fotográfico, con buenas interpretaciones de sus dos protagonistas principales…
Y poco más.
Sobre la película
La adolescencia, otra vez la adolescencia en verano en una película que sirve como un refrescante momento de primavera, y más bien que se queda ahí: en una comedia que no quiere llegar a ser una comedia del todo y en una relación de paisajes comunes que, aunque agradables, no dejan de ser repetitivos (llevamos ya varias generaciones viendo la misma película).
Una correcta recreación de los años 90 en la que llama la atención la fotografía, rodada en tonos de la época y que hoy, dirán los más jóvenes, es casi como un filtro de Instagram, pero que en aquella época era lo normal.
Una película que tiene un grave problema: no cuenta ninguna historia excepcional y se limita a revivir la adolescencia de manera acertada, correcta, pero casi sin sentido del humor ni recurriendo a la extravagancia propia de este tipo de producciones.
El resultado no es que sea soporífero, pero se queda en agradable y fácilmente olvidable, en una película que, sin destacar, deja un agrdable recuerdo que se esfuma con la misma presteza con la que llegó a nuestras vidas
Nuestra opinión
Livbiana, sencilla, bien interpretada, bien realizada pero, lamentablemente, sin ambición.