«Memorias de un caracol» es una película de animación australiana escrita y dirigida por Adam Elliot.
«Memorias de un caracol» es una película casi inclasificable que aúna un humor para adultos oscuro (muy osucro) y extravagante con una hermosísima fábula llena de ternura y encanto: una animación «stop motion» de ésas que, por su extravagancia, os puede encantar o no gustar en absoluto.
Eso sí, tiene todo el potencial para llamar la atención del público por su carácter único y su propuesta original.
Una película llena de temas trascendentales como la muerte, la soledad y la tristeza y que, sin embargo, sabe convertir esa amargura en un precioso relato lleno de ironía.
Argumento
Grace y su hermano Gilbert han crecido con un padre excéntrico y alcohólico que, un día, muere. Son separados y llevados a distintas partes de Australia, pero ambos siguen escribiéndose cartas y recordando su infancia, en la que los caracoles siempre jugaron un papel muy especial.
Sobre la película
Una película llena de cigarrillos, alcohol, muertes, chistes sobre pirómanos. «Memorias de un caracol» es una película con un humor excéntrico que sabe hacer ironía con la religión y con la muerte, con el Alzheimer y con el alcoholismo. Y sin embargo, y a pesar de todo ello, es una película hermosísima que, entre toda esta soledad, miedo y extravagancia, sabe sacar el lado positivo y hermoso de una vida llena de desdicha.
«Memorias de un caracol» posee un humor casi tenebroso en su animación, en su historia y en su narrativa global mientras que, a la vez, es una historia poderosamente hermosa sobre la infancia y toda una lección de vida sobre cómo ver con humor el lado sórdido de la existencia humana.
A pesar de ser una cinta de animación, no es para niños. No se la pongáis a vuestros hijos porque no es una de esas películas para ver en familia de la Disney. Es, de hecho, todo lo contrario al lado Disney.
Por cierto, tiene muchos chistes literarios: los personajes no paran de leer obras clásicas y todos los títulos de los libros llevan una broma a veces oculta y, siempre, muy simpatica.
Nuestra opinión
No se la pierdan. En su extravagancia y su original sentido del humor e inteligencia en el planteamiento, es una de esas películas que os llegará al corazón.