Como saben, cada capítulo de Black Mirror tiene sus propios actores y, sobre todo, historias distintas entre sí que tienen como nexo común la ciencia ficción y la tecnología.
Con “Hotel Reverie” nos situamos en el mundo del cine clásico, con una película ficticia y el rodaje de un remake por medio de un avanzado sistema de Inteligencia Artificial que introduce a personas reales en un universo recreado por la IA.
¿Saben lo que son las alucinaciones de la IA? Básicamente, es cuando la IA hace un razonamiento erróneo y, a partir de ahí, las conclusiones son descabelladas y los resultados son catastróficos: la IA ha “alucinado”.
“Hotel Reverie” es un capítulo muy original de la serie que arriesga y, además, sabe introducir el toque retro a la trama.
También tiene otra doble lectura, sobre todo para los amantes del cine: ¿no están destrozando los clásicos con tanto remake?
La trama
Unos productores deciden aplicar un innovador sistema para hacer un remake de una película clásica, pero todo se tuerce en el rodaje, y la trama cambia, por lo que la actriz real y la IA empiezan a cambiar la realidad ficticia y la película toma nuevos argumentos divertidos, extravagantes y también románticos.

Sobre “Hotel Reverie”
Sí, ya sabemos que últimamente buenas ideas hay pocas y que, por ejemplo, la Disney acaba de hacer una nueva versión de Blancanieves que se parece más bien poco a la original y, algunos opinan, que podrían habérsela ahorrado.
En “Hotel Reverie” se juega un poco con esta idea y se introduce, además, el tema de las alucinaciones de la IA, cuando la IA se equivoca y sigue razonando a partir de un error previo y, por consiguiente, va metiendo más y más la pata debido a que no parece tener manera de cotejar los resultados con nada “real”.
En el fondo, “Hotel Reverie” viene a ser una metáfora sobre este universo solitario en el que habita la IA que, por medio de datos y sus relaciones, carece en el fondo de la experiencia de la realidad, ahogada en un agujero negro de millones y millones de datos flotando y con conexiones realizadas más allá de la velocidad de la luz.
“Hotel Reverie” es un capítulo divertido y no quiere ir mucho más allá de lo anecdótico: no entra en el “modo pesadilla” y prefiere ser divertido, entretenido y con un toque simpático.
Nos recuerda a algún otro capítulo de temporadas anteriores, pero esta vez con un toque de mayor originalidad aunque, eso sí, no se aventura por ese modo pesadilla ni quiere entrar en ulteriores cuestiones filosóficas como plantearse la realidad.
Podría haber ido más allá, haber realizado algo menos anecdótico, pero este capítulo tiene gracia, frescura y sabe que no todo en la serie tiene que ser una pesadilla atroz y continuada.
Hay que saber relajar el ambiente, y “Hotel Reverie” lo hace adecuadamente.
Que lo disfruten.
Dónde ver «Hotel Reverie»