¡Shazam! La furia de los dioses es una película dirigida por David F. Sandberg protagonizada por Zachary Levi. Con Helen Mirren, Lucy Liu y Rachel Zegler.
Si la primera era “tonta” y fue un éxito precisamente por eso, ésta se esfuerza en ser más “tonta” aún.
¡Y lo consigue!
No se la tomen en serio. Siéntense y relájense porque esta comedia de superhéroes es ujna “frikada” de las buenas y no pretende ser nada más que eso: un blockbuster de los de siempre, de los familiares, de los de grandes presupuestos y pocas ideas, de los que llenan de efectos nuestros sueños y, cuando volvemos a la realidad nos decimos: qué aburrido.
Todo un homenaje a los ochenta que sabe tomar ese espíritu de intrascendencia de aquellos años y darnos un espectáculo “bobo” que es esta parodia de La Liga de la Justicia que a algunos les ha parecido mejor que la de Zack Snyder.
Y puede que a nosotros también.
A los tres segundos y medio has dejado de pensar en el guion, las cosas claritas. A los siete segundos ya sabes que la introspección de personajes brilla por su ausencia y que esto va a ser un chiste malo detrás de otro, con muchos efectos, con mucha gominola.
Cunado terminen las dos horas y media que dura la peli (sí, han leído bien) os darán ganas de compraros esa piscina de bolas para instalar en el jardín que, secretamente, siempre habíais soñado tener.
Si os apetece ser un poco niños otra vez, es una buena ocasión para dejarse llevar por esta estupidez profundamente vivaz, anecdótica y entretenida.