Un deseo irlandés es una película de comedia romántica de Netflix protagonizada por Lindsay Lohan. Con Ed Speleers y Alexander Vlahos.
¿Saben esas películas en las que una chica quiere casarse, los chistes no tienen demasiada gracia y la fotografía y los personajes parecen sacados de una postal? “Un deseo irlandés” se parece bastante a una de esas películas, aunque consiguiendo cierto grado de ironía y teniendo el aliciente de volver a ver a nuestra pelirroja favorita, Lindsay Lohan, en escena.
Una de esas películas de las que, gracias a Dios o a algún agujero negro, no vais a recordar.
Argumento
Maddie es la correctora de un novelista irlandés que resulta también ser un presumido y presuntuoso. Pero ella está enamorada, aunque él se va a casar con su amiga.
Cuando Maddie llega a la boda, un hada irlandesa le deja pedir un deseo, y ella desea casarse con el novelista, lo que cambia la historia.
Aunque también tenemos a otro chico irlandés guapo, simpático y de buen corazón que, aunque les sorprenda, logrará despertar el soñador corazón de nuestra dulce Maddie.
Sobre la película
No sabemos con qué imagen quedarnos, si con la Lindsay Lohan que salía en los periódicos saliendo de rehabilitación o con el papel que hace en esta película, una especie de soñadora en una película para niños románticos en una película que, totalmente pasada de moda, viene a rellenar el catálogo de Netflix.
No se engañen: esta película no está llamada a los Oscar ni a ningún premio cinematográfico. Es una de esas comedias románticas que se escriben solas y que resultan, para algunos, hasta ridículas, pero que tiene a Lindsay Lohan y, sólo eso, le da toda la ironía a la película.
“Un deseo irlandés” se puede leer como una comedia romántica estúpida (muy estúpida, avisamos) o como una ironía en sí misma que, sin ser inteligente del todo, tiene la gracia de tener a una estrella y hacer toda una parodia, precisamente, de las comedias románticas.
En todo caso, una producción que no hay que tomarse muy en cerio porque, en el fondo, todos han venido aquí a divertirse y los guionistas no parecen haber intentado el giro al neorrealismo que todos esperábamos en la carrera de Lindsay (es ironía, sí).
Nuestra opinión
Una comedia romántica más que nos podemos tomar o en su sentido literal o tratar de ver una ironía más allá de su pretendida ligereza y estupidez.
Ustedes eligen.